En un país con falta de información, rótulos claros y tolerancia por la decisión del otro, puja con fuerza el veganismo, como estilo de vida, cultura y ética, que respeta el medio ambiente, cuida y resguarda nuestra fauna, tan amenazada y violentada.
Hace pocos años se puso «de moda» el veganismo como estilo de vida saludable, y sobre todo responsable. Este tipo de alimentación, no solo promueve el no consumo de productos derivados de animales, sino que también busca concientizar sobre la importancia del respeto por la vida. ¿Fundamental no? Parece increíble que hayan personas que critican esta postura, que primeramente valora la existencia de todo ser vivo.
Así, este estilo de vida, inculca por un lado, el compromiso con la fauna, y por el otro, critica y repudia el consumo de productos derivados de animales, como la vestimenta realizada a su costa, los medicamentos o cosméticos testeados en ellos, lo mucho que se utilizan para experimentación, carga de peso, trabajo, entretenimiento. ¿No son acaso seres vivos? ¿No deberían tener el mismo trato que cualquier otro animal doméstico? No solo resulta espantosa la vida de aquellos animales que comemos, sino que se vuelve terrorífica la manera en que pasan sus cortos años, hacinados, encerrados, siendo utilizados para testeos, cargas excesivas de peso y torturas, golpes y dolor.
Esta cultura de defensa de la vida, parece difícil, y lo es. Ser vegano no es sencillo, sino sumamente complicado. Si bien, cada vez hay más restaurantes que incluyen esta opción, dietéticas con enormes variedades de productos, y conocimiento sobre el tema, la tarea de encontrar alimentos para consumir se torna exhaustiva. Ir a un supermercado, o lugar de comida rápida, por ejemplo, querer solucionar una comida de manera express en la calle, o consumir algo en el cine, se vuelven tareas complejas: leer en detalle cada componente, analizar de manera rigurosa el aceite o grasa que utilizaron para producirlo, el tipo de leche, el material con el que se hizo el envoltorio, frustran y mucho. El aspecto social resulta difícil y las reuniones sin opciones veganas, los cuestionamientos, opiniones infundadas, hacen que ser vegano se transforme en una elección valiente, corajuda, de quien prioriza al otro antes que a sí mismo, de quien busca justicia donde no la hay, de quien entiende, que, a falta de super héroes reales, debe cargar en su espalda la complicada pero reconfortante tarea, de hacer algo por el más necesitado, por el que no tiene voz.
¿Sos vegano? En Soy Consciente valoramos tu decisión, te apoyamos y agradecemos por comprometerte con el más vulnerable y con nuestro ecosistema. Celebramos tu compromiso con el otro y reconocemos el esfuerzo que hacés. Por eso, creamos este espacio, que busca, no solo ofrecerte productos de excelente calidad, sino también, información, consejos y apoyo en esta cruzada.
Tené en cuenta siempre contar con la información necesaria de profesionales para que tu nutrición sea siempre la adecuada 😉
Principios del Veganismo:
- Frenar el Calentamiento Global.
- Abolir la matanza y explotación de animales, para cualquier fin.
- Prohibir la manipulación genética.
- Evitar la contaminación ambiental.
- Desterrar el hambre en el mundo.
- Cesar la experimentación en animales.
- Terminar con la desinformación publica.
Podés leer la info de la UVA – Unión Vegana Argentina.